Que la pandemia ha golpeado duro a nuestra sociedad es algo conocido por todos nosotros.
La pandemia ha dado duro en negocios como la hostelería, el turismo, los pequeños comercios de nuestros barrios… Y nos ha hecho plantearnos hasta aquellas cosas que hacíamos de forma cotidiana, de forma automática, cosas en las que no nos parábamos a pensar pero que eran importantes para nosotros. Ahora valoramos mucho más un abrazo, un beso, el estar sentado en un bar con un refresco delante, una buena tertulia entre amigos…
Durante la pandemia, en el tiempo duro del confinamiento, cuando no podíamos salir casi ni a tirar la basura a la calle, valoramos muchísimo más hablar con los vecinos por los balcones, escuchar música un día cualquiera, a cualquier hora, saber de ese vecino que enfermó la semana pasada y que tuvo que ir al hospital, la tienda de abajo, que está para las urgencias sólo pero que ahora nos preparaban la compra, nos la traían y sólo teníamos que abrir la puerta y cogerla… En realidad, fueron las relaciones humanas, los lazos de amistad y cariño los que salieron ganando.
Sin embargo, los grandes azotados por el temporal fueron la hostelería y el turismo. Veíamos como a diario familias y familias que se dedicaban a estos sectores se veían abocadas a un negro destino. Por eso desde Hogares con Estilo, queremos hacerle un pequeño homenaje con esta entrada en nuestro blog. Tenemos varios clientes como Anastasia Pascual gerente del grupo de apartamentos rurales «La Chaparrina del Jerte», que tiene apartamentos rurales en el bellísimo Valle del Jerte (Extremadura) o Ignacio Valduérteles, gerente de una preciosa casa rural en pleno centro de Higuera de la Sierra (Huelva) llamada «La Casona de la Sierra» . Estas familias, aprovecharon esta parada que sufrió el mundo, para arriesgar, invertir, mejorar, innovar y construir unos preciosos alojamientos rurales. Nuestro reconocimiento hacia ellos porque, no sólo fueron valientes y emprendedores en estos tiempos difíciles, sino que también con su decisión dieron trabajo a mucha gente: albañiles, electricistas, pintores y ¡nosotros! que les llevamos nuestros cabeceros de forja para que pudieran completar la decoración de sus habitaciones.
Os dejamos sus contactos para que podáis comprobar que no exageramos nada cuando decimos que tienen ¡un gustazo y un estilazo! Y os animamos a visitarlos, seguro que no os van a defraudar.



