La semana pasada recibíamos un mensaje a través de nuestro Whatsapp. Era la profesora Eva Martínez y nos contaba que tenía previsto impartir un curso de profesionalidad llamado «Actividades administrativas en relación con el cliente» que se impartiría en el CIC Torrejón a finales de Marzo y… ¡Se habían fijado en nosotros, en nuestro trabajo!
Pero, ¿cómo se habían fijado en nosotros?
A veces pienso que las cosas que haces bien se dicen de unas personas a otras y bueno, sí, se corre la noticia, pero lentamente, pero las cosas que haces mal, esas corren a la velocidad de la luz… Nuestro caso ha sido el contrario. Un cliente que cuenta a otro cliente y que a su vez cuenta a otro cliente y a otro y a otro, que le gustó el servicio, el producto y el trato recibido por nuestra empresa, así empezó todo. Y un buen día, Eva, nos dice que nos quiere proponer a sus alumnos y alumnas como ejemplo de buenas prácticas.
Eva además, se propone darnos visibilidad, enseñar qué hacemos y cómo lo hacemos y nosotros no podemos hacer más que agradecérselo. No imagináis el chute de energía que nos dio en una mañana de mucho trabajo como la que llevábamos aquel día, diciéndonos sobre nuestro proceder «Pues la verdad que me pareció extraordinario. No es frecuente encontrar tanta sensibilidad, estamos en un mundo cada vez más veloz y deshumanizado…»


Seguimos pensando que, realmente, sólo hacemos nuestro trabajo, lo que ocurre es que lo hacemos gustándonos mucho aquello que cada día tenemos programado como faena y claro, eso se nota de cara al cliente.
Por supuesto tenemos días malos.
Por supuesto hay días que nada sale bien.
Por supuesto hay días que salen veinte pedidos y llegan cinco mal.
Pero intentamos no olvidar nunca que, lo que tenemos al otro lado del teléfono, es una persona como nosotros que merece ser atendida con amabilidad, con generosidad en cuanto a nuestro tiempo, que a veces necesita consejo de colores, formas, alturas… No olvidamos que, lo que está comprando, es una pieza para toda la vida y eso, como dice mi padre, ¡No es un huevo que se fríe!
Gracias a todas las personas que cada día nos animáis.
Sabemos que a pesar de los inconvenientes, incidencias y demás cosas no programadas, todo merece mucho la pena.