Hay tardes lluviosas que parecen diseñadas exclusivamente para ser admiradas desde la ventana, ahí, tras los cristales, pones tu peli preferida, un buen trozo de chocolate, una manta y todo es paz… O para quienes tienen niñ@s, tardes lluviosas, de esas que te invitan a hacer cosas chulas con ellos. Son tardes de compartir, de reír y de crear…
Te propongo algunas ideas que he tomado de aquí y allá, para compartir estas tardes pasadas por agua. Seguro que te gustan y además darán un toque muy personal a tu hogar…